CINISMO EXTREMO
“La película que yo estaba esperando y que necesitaba”: Eduardo Strauch
La Sociedad de la Nieve (España, 2023) es una película que al fin le hace justicia a los jóvenes protagonistas de esta brutal historia, que da fe del espíritu humano, el instinto de supervivencia, así como de la nobleza y valor que existe en dar la vida por los amigos. El autor de esta crítica además asistió a una función especial sucedida en la Cineteca de la Universidad de Guadalajara, el 18 de enero, en la que estuvo al final uno de los jóvenes supervivientes, líder y pieza fundamental para mantener con vida a sus amigos, Eduardo Strauch.
Por Samuel Eduardo Vaca Uribe
“No hay amor más grande que el que da la vida por sus amigos”
– Nota escrita por Numa Turcatti antes de fallecer

La Sociedad de la Nieve (España, 2023) es una película que al fin le hace justicia a los jóvenes protagonistas de esta brutal historia, que da fe del espíritu humano, el instinto de supervivencia, así como de la nobleza y valor que existe en dar la vida por los amigos. Dirigida por el reconocido director español Juan Antonio Bayona, producida por Netflix e inspirada en el libro homónimo, escrito por Pablo Vierci, quien al ser uruguayo y compañero de colegio de algunos de los chicos, narra los acontecimientos desde una mirada cercana y respetuosa, es una resignificación de la historia sobre el accidente aéreo ocurrido en 1972, un vuelo procedente de Uruguay con 45 pasajeros a bordo y que se estrelló en los Andes, dejando a solo 29 personas vivas, quienes lucharon por sobrevivir, en un entorno tan hostil, donde la vida era imposible.
El gran acierto de Bayona es retratar la historia de una forma humana y empática, centrando su relato en la amistad de los pasajeros y las ganas que tenían por sobrevivir, alejándose del tono morboso o de aventura, con el que esta historia fue tratada en sus anteriores versiones para cine, una mirada desde fuera, externa al origen del relato y el contexto de los involucrados, ¡Viven! (Estados Unidos, 1993), dirigida por Frank Marshall basada en el libro homónimo, escrito en 1973 por Piers Paul Read, y la película mexicana Supervivientes de los Andes (1976)dirigida por René Cardona.
La decisión de elegir a Numa Turcatti como el narrador de esta historia, es una forma de darle voz y recordar a las personas que no lo lograron, quienes no sobrevivieron y también fueron parte fundamental. De cierta forma, esta decisión narrativa, ayuda a desaparecer esa separación que existía entre los sobrevivientes y los que no volvieron. Escoger a Numa como el personaje que lleva el hilo conductor de la historia le da el valor y reconocimiento a aquellas personas que fallecieron en los Andes, personas cuya labor fue fundamental para el funcionamiento de aquella sociedad, la admirable Sociedad de la Nieve.
Como escribió Numa Turcatti en una nota antes de morir: “No hay amor más grande que el que da la vida por sus amigos”, frase extraída del pasaje bíblico (Juan 15:13 – 17) y que resume perfectamente lo que fue este grupo, como los sacrificios que hicieron por sus amigos los sacaron adelante y los ayudaron a volver a casa. En la película es mostrada como el detonante para que Nando Parrado y Roberto Canessa emprendieran la caminata final que concluyó con su rescate, no sin antes atravesar obstáculos y momentos en los que parecía que todo estaba perdido, algo recurrente durante aquellos complicados 72 días, donde el espíritu humano y el deseo de sobrevivir los mantuvieron a flote.
La decisión de elegir a Numa Turcatti como el narrador de esta historia, es una forma de darle voz y recordar a las personas que no lo lograron, quienes no sobrevivieron y también fueron parte fundamental. De cierta forma, esta decisión narrativa, ayuda a desaparecer esa separación que existía entre los sobrevivientes y los que no volvieron.
Samuel Eduardo Vaca Uribe

Desde lo técnico la película es impresionante, si Bayona ya había demostrado ser un tipo confiable para llevar a la pantalla grandes producciones como Lo imposible, Jurassic World o la serie El Señor de los Anillos: Los Anillos del Poder, sin duda La Sociedad de la Nieve es un trabajo que lo consagra como un cineasta muy interesante y capaz de darle una mirada impactante a producciones de gran escala. Hace apenas unos días logró un par de nominaciones en los premios Oscar, en las categorías de Maquillaje y peinado y Mejor Película Internacional, categorías donde a pesar de la dura competencia, se le ven grandes posibilidades de llevarse la estatuilla.
A pesar de no competir en categorías como efectos especiales, fotografía o banda sonora, son elementos que sin duda destacan y elevan la producción. Ese blanco que encandila de la nieve en las montañas, el juego de ópticas y los movimientos de cámara para mostrarnos lo pequeños que eran ante esa inmensidad, la desesperación que sentían y lo alejados que estaban de todo, acompañado de la música por momentos desoladora y por momentos sumamente emotiva del compositor Michael Giacchino.
Todo eso ayuda a mantener al espectador asustado, triste, expectante y sumamente metido en la historia, algo que no es tan fácil de lograr hoy en día, en donde las películas de streaming ganan terreno sobre las estrenadas en el cine. Ver películas en casa es muy cómodo, pero a la vez muy complicado, estamos expuestos a un montón de distracciones y aunque esta es una película producida por Netflix, el rey del streaming, está hecha definitivamente para verse en cines, nada mejor para adentrarse en la historia que una pantalla gigante, a oscuras, compartiendo con un montón de gente la experiencia de impresionarse y conmoverse, por una fascinante historia real, que fue llevada de gran forma a la pantalla, para darnos una perspectiva distinta y humanizada del relato que ya conocíamos. Aunque es verdad que, si la película no hubiera estrenado en Netflix, quizá no estaría tanto en la conversación como lo está hoy en día, unas por otras, supongo.
Función especial en la Cineteca FICG con al presencia de Eduardo Strauch

Hablando de verla en pantalla grande, tuvimos la oportunidad de asistir a una función especial en la Cineteca de la Universidad de Guadalajara, a la cual estuvo, uno de los jóvenes supervivientes, líder y pieza fundamental para mantener con vida a sus amigos en aquella sociedad de la nieve. En una emotiva charla, un emocionado Eduardo Strauch, compartió con el público presente sus sensaciones de la película, que comentó ya ha visto en seis ocasiones y es la versión que siempre estuvo esperando.
“Me preguntaron en una entrevista en televisión en Uruguay, como habían reaccionado los 15 al ver una función especial de la película, ¿Si nos había gustado?, les dije mira nos gustó muchísimo a todos, es la primera vez en 50 años que estamos todos de acuerdo en algo desde el primer momento, eso es un signo… un síntoma de algo realmente genial”, comentó emocionado Eduardo Strauch.
Eduardo comentó que durante todo el proceso, que duró alrededor de 8 años, Bayona y sus productoras siempre estuvieron presentes con ellos y pusieron especial atención al detalle, fueron respetuosos y trabajaron de forma muy minuciosa, los consultaron siempre acerca de los diálogos, la vestimenta, detalles del avión y su interacción. “A Bayona lo conocí en Madrid…. Me dijo la idea que tenía y como pensaba encararlo y ahí dije, este tipo es el que estamos buscando sin duda para hacer la película que yo estoy esperando y que necesito”, explicó.
“Me preguntaron en una entrevista en televisión en Uruguay, como habían reaccionado los 15 al ver una función especial de la película, ¿Si nos había gustado?, les dije mira nos gustó muchísimo a todos, es la primera vez en 50 años que estamos todos de acuerdo en algo desde el primer momento, eso es un signo… un síntoma de algo realmente genial”, comentó emocionado Eduardo Strauch.

Compartió algunas reflexiones que le han quedado tras más de 50 años de aquella odisea y como la montaña, lo hizo ser una mejor persona, enseñándolo a valorar la vida y poder aprender a disfrutar cosas como el silencio, estar en contacto y conectado con la naturaleza y el poder dar y recibir amor de sus seres queridos, disfrutando cada momento. “Lo más bonito de la vida es estar vivo, después de vivir dos meses y medio rodeado de muerte, valoro la vida mucho más y a medida que pasa el tiempo, cada vez la valoro más”, explicó.
Se mostró sumamente conmovido por la recepción del público que asistió a la función, comentado que siempre ha sentido una conexión especial por nuestro país, con México. Esta función fue una gran oportunidad de disfrutar de buen cine, sobre todo de poder escuchar de viva voz las enseñanzas y experiencias de uno de los protagonistas de este escalofriante suceso, reflejo de la voluntad humana.
Vale mucho la pena ver esta película, sales de la sala impactado, lagrimeando, revalorizando y agradeciendo cosas sencillas, es sin duda un trabajo brutal, que de forma empática relata la historia de los jóvenes, no solo de los 16 sino también de los que permanecieron en la montaña.
Si tienen oportunidad de ir a verla al cine, háganlo, y si no, ya sea en sus celulares… computadora… tabletas o donde puedan, sean testigos de esta gran historia, la historia de la sociedad de la nieve, que, a base de organización, ingenio, pero sobre todo unas profundas ganas de sobrevivir y darlo todo por el compañero. Libraron una de las proezas más grandes jamás vista.
C

Samuel Vaca. Nacido en Guadalajara, Jalisco. Licenciado en Comunicación y Artes Audiovisuales, con principal interés en dirección y guion cinematográfico, fue el encargado de dirigir el proyecto “Esto (no) es un documental pirata” proximo a estrenarse.







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