REPORTE CÍNICO

La FIL Zócalo debe equilibrar los espacios para ofrecer a las editoriales independientes una oportunidad justa de exposición. A ello se suma el evidente conflicto de interés al programar presentaciones de libros de funcionarios como Paco Ignacio Taibo II, director del FCE; Francisco Arce, director Editorial del FCE, con un libro ya presentado el año pasado en la misma feria; Argel Gómez, director de Ferias de la Secretaría de Cultura de la Ciudad de México; y Martí Batres, ex jefe de gobierno de la Ciudad de México, entre otros.

Por la Redacción Cínica

Este 15 de octubre, siete editoriales idepedientes con el nombre de Cooperativa Editorial, lanzaron una petición desde la plataforma Change.org en la que manifiestan su descontendo con las políticas implementadas en la Feria Internacional del Libro del Zócalo (FILZ) 2024, que se encuentra en desarrollo desde el 11 y hasta el 20 del mes en curso.

En la misiva afirman que la FILZ ha marginado de diversas maneras a las editoriales independientes, especialmente en lo que se refiere a las actividades culturales que acompañan el evento. Aunque reconocen que históricamente esta feria, que celebra su edición 24, «ha sido un espacio abierto a la pluralidad de voces», subrayan que «parece estar cada vez más monopolizada por intereses que poco tienen que ver con la auténtica promoción de la bibliodiversidad actual».

También dicen no estar de acuerdo «con la eliminación de tres de los seis foros que tradicionalmente se llevaban a cabo, bajo el pretexto de crear más espacio para los stands, algo que no ha ocurrido. En particular, el espacio destinado a las editoriales independientes no solo se ha reducido en su tamaño, sino que el costo de participación aumenta cada año. Como solución, los organizadores han impuesto a las editoriales compartir un espacio ya de por sí limitado, lo que reduce la visibilidad de cada sello».

Su inconformidad respecto a la distribución de los espacios disponibles para actividades culturales en los foros, es otro tema, ya que estos han sido acaparados por presentaciones de libros primordialmente del Fondo de Cultura Económica y de las charlas que responden a una agenda específica. Como ejemplo de ello, explican que «de las 147 presentaciones de libros, 23 tienen una agenda muy clara, y 22 son del Fondo de Cultura Económica (FCE), una situación inexplicable dado que dicha institución ya cuenta con 28 librerías en el país, además de las de Educal, lo que le otorga una enorme visibilidad».

De los 126 espacios disponibles para charlas, mesas y eventos musicales, 46 están destinados a temáticas partidistas como las mesas sobre Los retos de la 4T, Izquierda y derecha hoy, y el Encuentro de comunidades lectoras, entre otras. Es inaceptable que se nos niegue la oportunidad de presentar nuestras obras en una feria que debería ser un lugar de encuentro para la diversidad de ideas, donde todas las voces sean escuchadas.

Cooperativa Editorial

Cooperativa Editorial, que hasta la publicación de esta nota lleva 309 personas que han firmado la petición, creen que «la feria debe equilibrar estos espacios para ofrecer a las editoriales independientes una oportunidad justa de exposición. A ello -continúan- se suma el evidente conflicto de interés al programar presentaciones de libros de funcionarios como Paco Ignacio Taibo II, director del FCE; Francisco Arce, director Editorial del FCE, con un libro ya presentado el año pasado en la misma feria; Argel Gómez, director de Ferias de la Secretaría de Cultura de la Ciudad de México; y Martí Batres, ex jefe de Gobierno de la ciudad, entre otros».

Advierten que «de los 126 espacios disponibles para charlas, mesas y eventos musicales, 46 están destinados a temáticas partidistas como las mesas sobre Los retos de la 4T, Izquierda y derecha hoy, y el Encuentro de comunidades lectoras, entre otras. Es inaceptable que se nos niegue la oportunidad de presentar nuestras obras en una feria que debería ser un lugar de encuentro para la diversidad de ideas, donde todas las voces sean escuchadas».

Los denunciates solicitan a los organizadores y a las autoridades competentes, tales como la Secretaría de Cultura de la Ciudad de México, la Cámara Nacional de la Industria Editorial Mexicana (CANIEM) y la Brigada para Leer en Libertad, una rectificación de estas políticas. También «el reconocimiento del papel fundamental que desempeñamos las editoriales independientes en la vida cultural de la ciudad y la apertura democrática de los espacios para todas las editoriales participantes».

Al final de la carta, hacen enfasis en que no es la primera vez que han denunciado esta problemática y no solo han ignorado sus solicitudes, sino que han respondido con la cancelación de sus espacios, malos tratos y asignaciones en lugares marginales. Cooperativa Editorial, sin embargo, seguirá inisistiendo con «la esperanza de construir una feria más inclusiva y diversa, en beneficio de todas, todos y todes».

Firma esta petición si crees que la Feria Internacional del libro del Zócalo de Ciudad de México debe ser más plural e incluyente


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