COBERTURA CÍNICA / FIM Guadalajara
Por José Antonio Monterrosas Figueiras
Brasil es un país tan inmenso que ni los mismos brasileños lo acaban de conocer musicalmente hablando, me comenta Enrique Blanc durante una entrevista que sostengo con él por el libro «País tropical, Brasil y su música», editado por la Universidad de Guadalajara, que coordinó junto con la periodista brasileña Roberta Martinelli y el argentino Humphrey Inzillo.
Además la música brasileña para Blanc es una de sus debilidades, al preguntarle que hay actualmente en ese gran país del sur de América, me suelta una serie de nombres que en algún momento parece que está rapeando o haciendo un rezo en portugués.
Carlos Icaza, por su lado, quien presentó el libro junto con Blanc, la editora Carmina Nahuatlato y entre otras cosas, gestor cultural, Paulo Feitosa, me cuenta que vivió de 2005 a 2017 en Brasil, que anduvo de DJ por allá, él también vivió en Guadalajara y su participación en el libro es sobre el manguebeat en Guadalajara: una revolución que no terminó de llegar, advierte el también investigador.
En el libro hay una variedad de periodistas mexicanos y brasileños, que está dividido en tres rubros; Fuentes sonoras de la música popular brasileña al rock; Desembocaduras sónicas y Navegación es por la música de Brasil, identifico echando uno ojo al ejemplar que llevaba en las manos Carlos, a la periodista Mónica Maristain, el cronista «extranjero siempre» Leonardo Tarifeño y al mismo Enrique Blanc con un texto dedicado a Kiko Dinucci.
Minutos después de estas charlas hay un showcase de música de Brasil, donde toca La Mulher Barbada, una mujer que evidentemente lleva una frondosa barba negra con su rostro extravagantemente maquillado. Al platicar con ella luego de su show me comenta que en Fortaleza, el lugar donde vive, y en general en Brasil hay grandes apoyos por parte del gobierno para el tema de la diversidad.
Y hablando de barbas, más tarde, gracias al rait de Taz y su chica, en el la caja de su camioneta con sol a plomo incluído, pude llegar al Barba Negra, un bar por la colonia Americana donde tocaron cuatro bandas del proyecto 100 Jalisco, que son 100 agrupaciones originarias de este estado y que la curaduría la realiza una periodista de por acá, Ana Karen Martínez, quien me platicó que en 2024 llegaron a 3 mil propuestas, para elegir solo 100, y lo que escuchamos este jueves, fueron tan sólo cuatro.
La que más llamó mi atención fue la primera, Gazthli, una agrupación donde su cantante lleva el rostro pintado de blanco, que recuerda a Joker o El Cuervo. Él como es de Sinaloa sus influencias son los corridos y los corridos tumbados, pero sus letras son algunas melancólicas. Sin duda un proyecto interesante que parece que llegará muy lejos.
Lo mejor del día, eso sí, fue Belako, agrupación de post punk española, la propuesta más intensa y potente de lo que trajo Sounds from Spain que fue con lo que nos encontró la noche en el C3 Stage antes de volver a casa.
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