CINISMO INTERGALÁCTICO

En este pueblo guadalupano 

Pasábamos por el cine la noche del 13 de diciembre y nos encontramos con los últimos fanáticos de Star Wars. Nada del otro mundo como la película misma estrenada ese día con el nombre de: Star Wars: Episodio VIII – Los últimos Jedi.

Por Los Cínicos

En este pueblo guadalupano llamado México, también existe una devoción obstrusa por las películas de Star Wars. No nos complicamos demasiado en ello, sencillamente que el miércoles 13 de diciembre pasábamos por Plaza Universidad, en la Ciudad de México, donde está el Cinépolis más concurrido de toda la República Mexicana, dicen, y nos encontramos con un variado grupo de fanáticos de esta serie cinematográfica ahora amasada por la imperial Walt Disney. Ya sabemos que los disfrazados fue porque se llevó a cabo su estreno esa noche y bueno nos aventuramos a capturar —con un celular de tres pesos— algunos momentos de esta galaxia muy lejana para los que no somos sus fanáticos. 

En nuestra humilde opinión Star Wars: Episodio VIII – Los últimos Jedi es una película de cierre generacional, en el que la galaxia ya les quedó muy pequeña. La primera media hora es intrascendente, puede usted dormir si quiere. Con esta película, por otro lado, se acabaron los ídolos, porque ahora cualquiera puede ser jedi. Además pensamos que el mercado devora todo y Walt Disney se está convirtiendo en el único dios verdadero tipo Darth Vader. Eso sí, Yoda es punto y a parte y qué viva el empoderamiento de la princesa Leia.

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