CINISMO
El viaje de los argonautas de ébano a Europa
Fuocoammare: Fuego en el mar, (Italia-Francias, 2016) es la tercera película de la Muestra Internacional de Cine de la Cineteca Nacional, edición número 61, y el crítico asume que filme del italiano Gianfranco Rosi, cuenta con tres distinciones importantes que explica a continuación.
Por Francisco Meza

El mar Mediterráneo adquiere la capacidad de testigo ocular de epopeyas que se han suscitado desde hace varias décadas atrás y en las cuales argonautas africanos, en su mayoría, son los anónimos protagónicos que surcan peligrosas aguas con escasas pertenencias y con los bolsillos literalmente vacíos.
Estos viajeros llevan en su interior la ferviente esperanza de obtener el preciado vellocino de oro o una calidad de vida “superior”, a las condiciones económico-políticas que les antecede en sus países de origen
Bajo la dirección del documentalista italiano Gianfranco Rosi el titulo Fuocoammare: Fuego en el mar (Italia-Francias, 2016), forma parte de la selección de películas que integra la 61 Muestra Internacional de Cine.
En ella Rosi propone un interesante trabajo audiovisual donde la narración de la historia encuentra progreso, desde una plataforma bilateral donde en la primera lateralidad describe la vida cotidiana (ritual y sedentaria de los habitantes de la isla de Lampedusa en sus 20 kilómetros cuadrados de extensión territorial). La segunda se ubica un conjunto de selectas tomas y planos secuencia que dan cuenta sobre los argonautas africanos y de otras nacionalidades, los cuales de manera obligada circunnavegan al rededor de la isla mayor del Archipiélago de las Pelagias, es decir Lampedusa claro esta, siendo detectados por los medios de vigilancia militar y civil italianos.
La idea del director no es presentar un documental que de manera especifica describa la hambruna, sufrimiento y mortandad entre los argonautas de manera especifica, sino una exhortación a los gobiernos aludidos para diseñar e implementar urgentes programas eficaces para la ayuda que se les pueda aportar a los migrantes.
Así desde esta relación a distancia de conexión con la isla el cineasta de la bota itálica, establece un estado comparativo entre la forma de vida de los sedentarios pescadores y agricultores habitantes de Lampedusa y las insuficientes y casi nulas «formas de ayuda» improvisadas por las autoridades italianas.
La idea del director no es presentar un documental que de manera especifica describa la hambruna, sufrimiento y mortandad entre los argonautas de manera especifica, sino una exhortación a los gobiernos aludidos para diseñar e implementar urgentes programas eficaces para la ayuda que se les pueda aportar a los migrantes.
Rosi va en “crescendo» o en aumento de cargas progresivas de intensidad para los viajeros en el desarrollo de su historia, mostrando con claridad las diferencias entre una vida sedentaria y las fatales y desdichadas circunstancias de los argonautas de ébano.
El filme cuenta con tres distinciones objetivas que contribuyen en gran medida a la calidad y cualidades del trabajo; en una primera instancia, la excelsa fotografía que es del mismo Gianfranco Rosi; la segunda atañe a la bilateralidad geométrica narrativa —además de comparativa— y tercero, el contenido que va dirigido a las autoridades italianas involucradas. ©
Francisco Meza es antropólogo y crítico de cine.